PRIMERA VERDAD JUSTICIALISTA

"La verdadera Democracia es aquella donde el Gobierno hace lo que el Pueblo quiere y defiende un solo interés: EL DEL PUEBLO"

La historia sigue su curso. El Pueblo de hoy no es la organización clásica de la prehistoria sociológica, ni la primitiva organización totémica comunista, ni el modo contractual del "potlach" (ceremonia practicada por los pueblos indios de la costa del Pacífico -Canadá y EEUU- donde se obervan las relaciones jerárquicas entre los grupos)con su jerarquía de vasallos.
El Pueblo sabe dónde va, qué quiere y cómo conseguirlo.
Está preparado para repeler los espejismos de las seudo doctrinas reivindicadoras, porque tiene experiencia de hambre, abusos y fraudes. Los regímenes omnicomprensivos, que desde la absorvente "polis" griega hasta la Revolución Francesa debilitaron la personalidad humana hasta privarle de todo raciocinio, no tiene cabida en legislaciones jóvenes.
La Primera Verdad del Justicialismo cobra actualidad indiscutida, porque el General Perón se coloca en la actitud personalista cuya realización, difícil por cierto, se basa en el ejercicio colectivo de la libertad y la dignidad humanas.
La Primera Verdad Justicialista revela magnífico ideario. El Pueblo manda; el Gobierno cumple, dignifica y defiende sus intereses.
Queden atrás los políticos quiméricos, gestando irrealidades desde sus butacas de gabinete.
Queden atrás los oportunistas, los explotadores y los embozados apologistas de ideologías foráneas.
Atrás los envenenadores del Pueblo, que administran la droga funesta de la antipatria y el derrotismo.
Queden atrás los indecisos, como lastre que se pierde en la bruma del pasado, para aligerar la marchatriunfal e indetenible de la Nueva Argentina.

Natalio Tomás Garrone.
Veinte Verdades del Justicialismo Peronista.
Ed. Mangione Hnos. 1951